La inversión es la base sobre la cual se sustenta el desarrollo de un país, región o localidad, a través de la creación de capacidades productivas y para el mejoramiento de la calidad de vida de los habitantes. Una alta tasa de inversión privada contribuye al crecimiento del país, del mismo modo que una inversión pública vigorosa y eficiente es requisito para un crecimiento sostenido, equitativo y ambientalmente sustentable.